24 de julio de 2012

La visita de Sonia

A finales de abril, entre tíos y abuelos, tuvimos la visita de Sonia, Loli y Alex, amigos sevillanos/valencianos/franceses que pasaron apenas dos días con nosotros. Muy poco tiempo pero más que suficiente para que Jaime viviera su primer flechazo. Por supuesto que él es un ligón y que va dejando novias por donde quiera que vaya, pero es que de Sonia estuvo hablando varias semanas después de que esta se fuera, incluso en sueños la nombraba. Aquí os dejo el extenso reportaje de la visita.

Como había que aprovechar al máximo el tiempo, recién llegados nos los llevamos a dar un paseo al centro, a cenar y a jugar, claro, con todo lo que se prestara. Eindhoven, 27 de abril de 2012.


Esperando la cena haciendo un poco el payasete. Eindhoven, 27 de abril de 2012.

El sitio elegido fue la terraza del Café de Wildeman, en pleno Markt. Estos fueron los manjares. A destacar la "Big Wildeman's Bruger", tremendo hamburguesón de 400 gramos que se zampó Alex como si tal cosa. Eindhoven, 27 de abril de 2012.
Sonia y Jaime nos hicieron de modelos posando junto a esta imaginativa forma de decorar las arquetas (o como se llamen). Eindhoven, 27 de abril de 2012.
Aquí los padres cargadores con sus respectivos. Nótese la diferencia de soltura a la hora de ser transportados de cada uno de los peques, Jaime va a comprimirle el cerebro a Sergio un día de estos!! Eindhoven, 27 de abril de 2012.
Por la noche les preparamos a los dos los futones en el dormitorio para que durmieran juntos. No sabíamos cómo iba a resultar el experimento, pero había que intentarlo. Lo primero, un cuento para ir calmándolos. Eindhoven, 27 de abril de 2012.
Sonia, Loli y Jaime atentos a la lectura de Sergio. Eindhoven, 27 de abril de 2012.
Tras el cuento, a dormir. Y vaya que sí, un poco de fiesta pero pronto estaban ya con los ojitos cerrados y descansando. Eindhoven, 27 de abril de 2012.

A la mañana siguiente, claro, fuerzas renovadas. El que hace de caballo (?) es Sergio, sí... Eindhoven, 28 de abril de 2012.





Aprovechamos el sábado para irnos a Utrecht y darnos un paseo por el centro, el "Oude Gracht". Eindhoven, 28 de abril de 2012.
La parejita de "holandeses" posando en el café Orloff, en el que almorzamos. Eindhoven, 28 de abril de 2012.

Aquí, el menú, que no estuvo nada mal . Eindhoven, 28 de abril de 2012.

Y tras la comida, turismo. Comenzamos por la Domtoren, la Domplein y la Domkerk, para qué calentarse más la cabeza con los nombres, verdad? Eindhoven, 28 de abril de 2012.

Sonia y Jaime cual grupo de indie-rock en el claustro de la Domkerk.  Eindhoven, 28 de abril de 2012.

Ampliamos la típica visita que solemos hacer a Utrecht y nos dimos un paseo por el Zocherpark, que estaba así de verde, cómo no!! Eindhoven, 28 de abril de 2012.

De vuelta buscando ya el coche, Sergio y Jaime de la mano ¿Alguien nota algo raro en esta foto? Eindhoven, 28 de abril de 2012.
Efectivamente, en algún momento de su historia Utrecht sufrió una invasión alienígena o de arquitectos imaginativos, está por confirmar. Eindhoven, 28 de abril de 2012.
Ya en casa, descansando del agotador paseo por Utrecht, Jaime descubriendo las cualidades del iPad de Loli. Eindhoven, 28 de abril de 2012.

Al día siguiente, domingo, nos dimos un paseíto por Hanevoet, nuestro barrio. Estos niños no saben lo que es una cámara de fotos, ¿verdad?Eindhoven, 29 de abril de 2012.
A la hora del almuerzo los llevamos de nuevo al centro para que probaran el sushi a cascoporro que ponen en el Soho. De camino, a correr y a saltar!! Eindhoven, 29 de abril de 2012.
Comenzaban las despedidas. La parejita empezaba a ser conscientes de la separación y quería dejar bien claro que, a pesar de disputas varias, el amor había surgido. Eindhoven, 29 de abril de 2012.
Un último paseo por la 18 Septemberplein. Eindhoven, 29 de abril de 2012.
Y un último y divertido posado ante las inexplicables fuentes de la misma plaza. Eindhoven, 29 de abril de 2012.

3 comentarios:

  1. ¡ Qué chulo el reportaje! Qué sincera y tierna es la amistad a esa edad...(no ofenderse papis,pero me refiero a la de los niños). ¿En qué momento nos volvemos tímidos e inseguros? Ojalá que esta pareja no cambie nunca.
    Besos,Isabel

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  2. Toda la razón del mundo, Isabel, da gusto ver la naturalidad con la que viven las relaciones cuando son tan peques, sin hipocresías, ni dobles sentidos... en fin, un gustazo!

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  3. Santa inocencia la de los peques. Es una pena que el tiempo pase por ellos (y por nosotros).

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