4 de enero de 2014

¿Por qué lo bueno dura tan poco?

Podría seguir el consejo de Jaime de esta mañana: “Mamá, no hablemos más de que los titos se tienen que ir, que me da mucha tristeza”, pero he preferido seguir hablando del tema para así aprovechar y mandarles a Merchi y Manolo un beso enorme y darles las gracias por pasar con nosotros unos días geniales y ¡¡una entrada de año de las que se recordarán!! El año que viene, más y mejor, ein?


No hay comentarios:

Publicar un comentario