… No tiene nada que ver con lo que se habla
en algunos lugares del mundo, como por ejemplo,… en Londres.
“Nil by mouth”, 1997, laureada película
británica dirigida por Gary Oldman es un claro ejemplo de lo que digo más
arriba. Vean el vídeo.
El ejercicio fue, al menos, divertido. Y no
lo digo por la película, que te hace sentir bastante mal y que se lleva dos
horas sin dar ninguna concesión y cuando la da no es nada creíble, sino por el
reírnos de nosotros mismos al comprobar que nos sueltan en un barrio de estos
en Londres y da igual que lo hubieran hecho en mitad de Cracovia.
En fin… ánimo,
siempre nos quedará Holanda para entender a la gente hablando inglés.